ANA KARENINA - Leon Tolstoi
Al comienzo de la primera parte, el
príncipe Stepán Arkádievich Oblonsky , personaje principal y alto funcionario
que ha sido infiel a su mujer Darya Aleksándrovna ("Dolly"), llama a
su hermana casada, Anna Karénina, que reside en San Petersburgo, para que
convenza a Dolly de que no lo abandone.
Cuando el tren de Anna está llegando
a Moscú, un trabajador del ferrocarril cae accidentalmente en las vías.
Mientras tanto, un amigo de la infancia de Stiva, Konstantín Dmítrievich Lyovin
llega a Moscú para proponer matrimonio a la hermana menor de Dolly, Ekaterina
Aleksándrovna Shcherbátskaya ("Kitty").
Kitty lo rechaza esperando una
oferta de matrimonio del oficial Conde Alekséi Kiríllovich Vronsky. Pero a
pesar de su interés por Kitty, él no piensa en casarse con ella. Pronto se
enamora de Anna, después de conocerla en la estación de tren de Moscú y bailar
una mazurca con ella en una fiesta.
Anna, sorprendida por su respuesta
favorable al galanteo de Vronsky, regresa enseguida a San Petersburgo. Vronsky
la sigue en el mismo tren. Lyovin regresa a su granja, abandonando toda
esperanza de matrimonio, y Anna regresa con su marido, Alekséi Aleksándrovich
Karenin,
Un alto funcionario del Gobierno, y
su hijo Seriozha.
En la segunda Parte, Karenin regaña
a Anna por relacionarse demasiado con Vronsky y generar chismorreos de la
aristocracia a la cual pertenecen, pero después de un tiempo, ella vuelve a su
relación con Vronsky y queda embarazada de él. Anna se muestra angustiada
cuando Vronsky se cae en una carrera de caballos a la cual acude con su esposo,
haciendo evidentes para la sociedad sus sentimientos y obligándola a
confesárselos a su marido. Cuando Kitty se entera de que Vronsky prefiere a
Anna sobre ella, se marcha de vacaciones a Alemania para recuperarse, creciendo
en ella una fuerte religiosidad antes desconocida.
La tercera Parte examina la vida de
Lyovin en su granja rural. Dolly se encuentra con Lyovin e intenta revivir sus
sentimientos por Kitty. Dolly parece no haberlo conseguido, pero finalmente
Lyovin se da cuenta de que aún la ama. De nuevo en San Petersburgo, Karenin se
niega a conceder un divorcio en favor de Anna y la amenaza con impedirle ver a
su hijo Seriozha si lo abandona.
Sin embargo, en la cuarta Parte,
Karenin encuentra la situación intolerable y empieza a pensar en el divorcio.
El hermano de Anna, Stiva, se opone y convence a Karenin de que hable con Dolly
primero. Una vez más, Dolly parece fracasar en su tarea, pero Karenin cambia
sus planes cuando descubre que Anna está muriendo de fiebre puerperal durante
el parto. Al acudir a verla descubre a Vronsky sufriendo al lado de Anna; ante
esto Karenin perdona a Vronsky allí mismo, quien intenta suicidarse por el
remordimiento. Sin embargo, Anna se recupera, habiendo dado a luz a una hija a
la que también llama Anna ("Annie"). Vronsky planea marcharse a
Tashkent, pero cambia de opinión al ver a Anna, y ambos se marchan a Europa sin
haber obtenido el divorcio de Karenin. Por otro lado, Stiva planea un encuentro
en el que Lyovin y Kitty se reconcilian.
En la quinta parte, Lyovin y Kitty se
casan. Unos meses después, Lyovin se entera de que su hermano Nikolái está
muriéndose. La pareja acude con él, y Kitty lo cuida hasta que fallece,
mientras se da cuenta de que está embarazada. Anna y Vronsky
viajan a Europa y
allí tratan de ser aceptados por la sociedad pese a no ser esposos, pero no
logran relacionarse con los rusos residentes en el extranjero al no estar
casados, cayendo en el aburrimiento y el tedio al haber dejado atrás su círculo
de amistades. Añorando el medio social típico de la aristocracia rusa, Anna y
Vronsky vuelven a Rusia para rehacer su vida como pareja, pero mientras la
sociedad rusa permite a Vronsky reanudar sus contactos con sus viejos amigos (a
cambio de no presentarse públicamente con Anna ni mencionarla), Anna es excluida
por todas su antiguas amistades de San Petersburgo, que la marginan de todo
evento social donde años antes podía presentarse. Peor aún, sus amistades
rechazan sus invitaciones y se niegan a visitarla o a saludarla en el teatro
donde Anna acude pese a la oposición de Vronsky.
El ostracismo que la
aristocracia impone a Anna hiere duramente a la protagonista, acostumbrada a
una intensa vida social desde su juventud dentro del mismo círculo de personas.
Karenin ha engañado mientras tanto a
Seriozha, haciéndole creer que su madre ha muerto por consejo de la condesa
Lidia Ivánovna, una fanática religiosa apegada a las hipocresías sociales,
aunque Seriozha duda de la realidad de esa historia. Anna logra visitar
clandestinamente a Seriozha por su noveno cumpleaños y se entera allí de la
mentira construida por Karenin, pero éste la descubre y al cruzarse ambos,
Karenin baja la mirada mientras Ana deja con prestesa su antigua casa
matrimonial. Desesperada, Anna convence a Vronsky para huir de la ciudad y
establecerse en la vasta finca familiar de éste.
Dentro de la sexta parte, podemos
ver como Lyovin y Kitty viven en el campo, sus relaciones con los campesinos y
demás trabajadores, así como el recibimiento de miembros de la familia. Por
otra parte, cerca del lugar viven Vronsky y Anna en un viejo castillo,
remodelado con lujos exagerados y visitas inesperadas. En este capítulo se
recalca la nueva vida familiar que lleva Lyovin, con riquezas pero sin
ostentación, y el lujoso estilo de vida que sostiene Vronsky. Se hace notar
además, que Anna pierde cada día más el juicio por celos irracionales y mal
fundamentados y su repulsión hacia la soledad, sintiendo pánico ante la
posibilidad que Vronsky la abandone. Pensando que la negativa de Karenin a
darle el divorcio hace que Vronsky se aburra de ella al ser inviable un
matrimonio entre ambos, Anna convence a Vronsky de dirigirse nuevamente a
Moscú.
La séptima parte muestra el retorno
de Anna y Vronsky a Moscú. Allí Vronsky retorna prontamente a su relajada vida
urbana, frecuentando los clubes de sus viejos amigos donde se encuentra con
Stiva, quien a su vez le presenta a Lyovin. En contraste, Anna sufre en Moscú
el mismo ostracismo que había vivido en San Petersburgo, agravado por el tedio
ante las ausencias de Vronsky y los celos furibundos cada vez más crecientes
que Anna siente hacia la vida social de Vronsky, lo cual hace más frecuentes y
severas las disputas de la pareja. Estos pleitos a su vez aumentan más el
aburrimiento de Vronsky hacia Anna e incrementan sus ausencias para huir de la
presencia de ella. Las sospechas de Anna alcanzan su punto máximo cuando cree
que una tarde Vronsky se encontrará con una supuesta amante que la madre de
éste le ha conseguido para casarse.
La actriz Mariya Guérmanova (Мария Германова: (1884 - 1940) en un fotograma de la Película
de 1914 Anna Karénina (Анна Каренина), dirigida por Vladímir Gardin (Владимир
Гардин: 1877 - 1965).
La ira de Anna estalla al
convencerse sinceramente de la "traición" de Vronsky y, desesperada,
marcha a la misma estación ferroviaria moscovita donde conoció a Vronsky. En
paralelo con el evento visto al inicio de la obra, Anna se lanza a las vías
para cometer suicidio.
La octava parte muestra la
desesperación de Vronsky, quien desea morir tras el suicidio de Anna y se
enrola como voluntario para combatir en la revuelta de Serbia contra Turquía.
Karenin asume el cuidado de la hija de Anna como suya, mientras Lyovin sufre
una nueva conversión en su finca rural. Allí Lyovin reflexiona sobre los
eventos recientes y descubre que, pese a tener una hermosa familia y una buena
posición económica, eso no le asegura ser feliz sino que precisa orientar su
vida hacia la bondad y la simplicidad de la existencia.
Breve reseña de la novela:
Narra la trágica pasión amorosa de
ana, casada sin amar con el ministro Alejo Karenin, pero se enamora
perdidamente del joven oficial Alexis Vronski.
Después de una lucha interna,
abandona su casa, su esposo, su hijo, para irse a vivir con Vronski.
La falsa situación social, la
prohibición de ver a su hijo, las continuas reyertas entre los amantes,
provocan la ruptura y la desesperación que obliga a Ana a arrojarse en la vía
férrea al paso del tren.
Desarrolla la pasión condenable de
Ana, el autor demuestra que es un maestro en el conocimiento de la vida
psíquica y que él dominaba “Dialéctica del alma”.
Lea también:
No hay comentarios.:
Publicar un comentario